Este domingo 8 de mayo se celebrará un nuevo Día de la Madre en todo el país. Serán
cientos las mamás que afortunadamente contarán con el saludo afectuoso de sus hijas
e hijos, pero hay un número no menor de ellas que estarán solas, sin la contención y el
abrazo que tanto necesitan.
En los 28 hogares de Fundación Las Rosas, entre Coquimbo y Los Lagos, se celebrará el
Día de la Madre, fecha especialmente emotiva, que nos llama a recordar y reflexionar sobre
la abnegación de estas mujeres mayores, muchas veces solas y olvidadas, pero que en la
institución de ayuda fraterna son celebradas y queridas como ellas lo merecen.
En Fundación Las Rosas ( www.fundacionlasrosas.cl ), un número importante de residentes
no cuentan con visitas habituales de familiares o amigos, situación que se hace aún más
patente en estas fechas. “Alrededor de un 85% de las personas mayores no cuentan con un
hijo o hija que los visite periódicamente o en fechas tan importantes como el día de la
Madre o del Padre; y no porque no exista, sino porque simplemente no vienen”, explica la
Dra. Claudia Ríos, médico auditor de la Fundación.
La doctora Ríos explica que ante esta situación de abandono, “son las cuidadoras, el
personal de salud, los equipos directivos y de religiosas del Hogar quienes se preocupan de
regalarles un día especial y celebrarlas, intentando de alguna manera suplir la ausencia del
afecto de algún familiar”. La profesional agrega que si bien existe un porcentaje no menor
de residentes que sufre algún grado de demencia (75%) lo cual no les permite darse cuenta
del todo de estos hitos sociales, el acompañamiento también es un aspecto fundamental en
el cuidado de las personas mayores en esta situación.
“Pese a su estado, logran percibir que algo está pasando, que es un día en que se entrega
cariño y compañía; se dan cuenta que el otro residente sí es visitado y se preguntan por qué
a mí no, porque yo no recibo ese cariño”. En términos médicos, una persona mayor que no
es visitada o acompañada comienza a retraerse de su entorno social cercano. “Dejan de
tener esa esperanza y el sistema cognitivo empieza a deteriorarse aún más, también se ve
mayor prevalencia de cuadros depresivos. Esto baja también los niveles inmunológicos,
trayendo consigo enfermedades o la exacerbación de patologías que ya están presentes»
agrega la especialista.
Desde la Fundación hacen un llamado a “no olvidarlas” especialmente este día y a visitar a
las residentes, participando de las actividades que tengan programadas para ese día los
distintos equipos de los Hogares. En la institución de acogida reconocen que también hay
hijos y familiares que son muy presentes y siempre visitan a sus familiares en los Hogares,
especialmente ahora que la situación de la pandemia ha bajado un poco, lo que es muy
positivo para ellas y ellos. “Tener un acompañamiento activo con nuestras personas
mayores les permite mantener sus habilidades sociales, mantenerse más activos y sobre
todo sentir que aún son queridos”, finaliza la doctora Claudia Ríos.